¿Cómo podemos evitar que los alimentos se echen a perderbr

Desde hace mucho tiempo, el ser humano ha estado luchando contra el desperdicio de los alimentos. Según un estudio realizado por el United Nations Environment Programme (UNEP), se estima que un tercio de todos los alimentos producidos en el mundo se pierden o se desechan cada año. Esto es un problema enorme, tanto a nivel económico como medioambiental. Según el FAO, el coste anual de este desperdicio asciende a 1,2 billones de dólares, mientras que el daño medioambiental es de 870 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono.

Aunque parezca increíble, la mayor parte de este desperdicio se produce en países desarrollados, donde se tiran cada año más de 100 kilos per cápita de alimentos. Esto es debido a que en estos países se produce un exceso de comida, y los alimentos se descartan porque no cumplen con los estándares estéticos o porque se consideran caducados. Sin embargo, en países en vías de desarrollo, el problema es la falta de comida, y el desperdicio se produce principalmente en la agricultura y la industria alimentaria.

El desperdicio de alimentos es un problema complejo que requiere un abordaje multisectorial. No obstante, existen algunas medidas que podemos adoptar para reducirlo. En primer lugar, podemos planificar mejor nuestras compras para evitar comprar más comida de la necesitamos. También podemos cocinar solo lo necesario y consumir los restos. Asimismo, es importante guardar los alimentos correctamente para evitar que se echen a perder. A continuación, detallaremos cada una de estas medidas con más detalle.

La planificación de las compras es clave para evitar el desperdicio de comida. Antes de ir al supermercado, es importante hacer una lista de lo que necesitamos y comprar solo eso. De esta forma, evitaremos comprar impulsivamente productos que luego no utilizaremos y acabarán en la basura. También es importante tener en cuenta la caducidad de los productos y planificar las comidas en función de ello. Por último, es recomendable comprar en tiendas locales o directamente a los productores, ya que suelen ofrecer productos frescos y a buen precio.

Otra forma de reducir el desperdicio de comida es cocinar solo lo necesario. Muchas veces cocinamos más comida de la que podemos comer y acabamos tirando los restos. Para evitar esto, podemos medir bien las cantidades o cocinar platos sencillos que podamos adaptar a lo que tengamos en casa. También es importante aprender a conservar los alimentos correctamente para evitar que se echen a perder. Los alimentos frescos suelen ser más propensos a deteriorarse, así que debemos consumirlos antes. Los productos congelados también requieren una buena conservación para evitar que se deterioren.

En resumen, el desperdicio de comida es un problema grave tanto económica como medioambientalmente. Sin embargo, existen medidas que podemos adoptar para reducirlo, como planificar mejor nuestras compras o cocinar solo lo necesario. También es importante aprender a conservar los alimentos correctamente para evitar que se echen a perder. Si adoptamos estas medidas, contribuiremos a reducir el desperdicio de comida y mejoraremos nuestra calidad de vida