¿Qué consecuencias puede tener un exceso o un déficit de nutrientes en la dieta de los pollos de engorde

Aunque los pollos de engorde pueden obtener la mayoría de los nutrientes que necesitan de una dieta bien equilibrada, un exceso o un déficit de ciertos nutrientes puede tener consecuencias negativas para su salud y el rendimiento.

Un exceso de proteína en la dieta de los pollos de engorde puede conducir a una sobrecarga del hígado y los riñones, lo que puede causar problemas de salud a largo plazo. También puede aumentar el nivel de amoniaco en las excretas, lo que puede ser tóxico para los pollos y causar malestar respiratorio.

Por otro lado, un déficit de proteína en la dieta puede reducir el crecimiento y aumentar la susceptibilidad a las enfermedades. También puede causar anemia, debido a una deficiencia de hierro.

Un exceso de energía en la dieta también puede ser perjudicial para los pollos de engorde. Puede causar obesidad, que es un factor de riesgo para varias enfermedades, incluyendo diabetes y enfermedades cardiacas. También puede hacer que los pollos se vuelvan más sedentarios, lo que afecta negativamente al rendimiento.

Por otro lado, un déficit de energía puede causar inanición y malnutrición. Los pollos con estas condiciones son más susceptibles a las enfermedades y su rendimiento es menor.

Los minerales son otro aspecto importante de la dieta de los pollos de engorde. Un exceso de calcio puede causar problemas digestivos y un descenso del pH en las excretas. También puede aumentar el nivel de oxalatos en las mismas, lo que puede ser tóxico para los pollos. Un déficit de calcio, por otro lado, puede conducir a una mala calcificación ósea y debilitamiento del esqueleto.

El fósforo es otro mineral importante para la salud ósea de los pollos de engorde. Un exceso de fósforo en la dieta puede inhibir la absorción del calcio, lo que puede conducir a problemas óseos. Un déficit de fósforo, por otro lado, puede debilitar el esqueleto y aumentar la susceptibilidad a las fracturas.

Las vitaminas son otro nutriente importante para la salud y el rendimiento de los pollos de engorde. La vitamina A es importante para la visión, el crecimiento y la reparación del tejido. Un déficit de vitamina A puede conducir a ceguera, debilitamiento del sistema inmunológico y problemas respiratorios. La vitamina D es importante para el metabolismo óseo y la absorción del calcio. Un déficit de vitamina D puede conducir a raquitismo, osteomalacia y debilitamiento del esqueleto.