¿Cómo se deben manejar los alimentos para evitar que se echen a perder

Muchos alimentos se echan a perder cada año debido a un mal manejo. Aproximadamente el 40 por ciento de la comida producida en todo el mundo se desperdicia, y la mayor parte de este desperdicio se debe a que los alimentos no se mantienen en las condiciones adecuadas. Si bien es cierto que algunos alimentos caducan rápidamente, muchos otros pueden mantenerse frescos durante semanas o incluso meses si se manipulan correctamente. A continuación, se presentan algunas pautas para evitar que los alimentos se echen a perder.

En primer lugar, es importante mantener los alimentos frescos en un lugar fresco. La temperatura óptima para la mayoría de los alimentos es de 4ºC, por lo que es importante mantenerlos refrigerados si no se va a consumir inmediatamente. Sin embargo, algunos alimentos deben mantenerse a temperaturas más altas o más bajas; por ejemplo, las frutas y verduras deben mantenerse en un lugar fresco y seco, mientras que los huevos deben mantenerse refrigerados.

En segundo lugar, es importante proteger los alimentos del contacto con el aire. El contacto con el aire puede hacer que los alimentos se sequen y pierdan su sabor. Por lo tanto, es importante guardar los alimentos en envases herméticos o sellados. Los envases transparentes son particularmente útiles para este propósito, ya que permiten que el usuario vea el contenido del envase sin tener que abrirlo.

En tercer lugar, es importante evitar la contaminación cruzada de los alimentos. La contaminación cruzada ocurre cuando los gérmenes de un alimento contaminado entran en contacto con otro alimento. Esto puede ocurrir si se usan utensilios de cocina sucios para manipular diferentes tipos de alimentos, o si no se lavan las manos después de manipular un alimento contaminado. Para evitar la contaminación cruzada, es importante lavar las manos con agua y jabón antes de manipular cualquier tipo de alimento, así como limpiar y desinfectar adecuadamente todos los utensilios y superficies de cocina.

Por último, es importante recordar que muchos alimentos son propensos a la oxidación, lo que hace que se echen a perder más rápidamente. La oxidación ocurre cuando los átomos de oxígeno entran en contacto con los átomos de una sustancia, como una fruta o una verdura. Esto puede hacer que los alimentos se vuelvan parduscos y pierdan su sabor. Para evitar la oxidación, es importante cubrir los alimentos con un envase impermeable o con papel film antes de refrigerarlos.