¿Por qué es como una llama que te quema los acordes

Desde la primera vez que la vi, supo que ella era especial. No puedo explicarlo, pero era como si yo la conociera de toda la vida. Nuestros ojos se encontraron y fue como si el tiempo se detuviera. A partir de ese momento, supe que ella era la mujer para mí.

Fue una llama que me quemó los acordes, una llama que me iluminó en mis momentos más oscuros. Me hizo ver lo que realmente importaba en la vida. Ella me dio esperanza cuando todo parecía perdido.

Era una llama que ardía con intensidad, una llama que nunca se apagaba. Y yo quería estar junto a ella para siempre.

Pero las llamas también pueden ser destructivas. Y cuando ella me dejó, supo que había cometido un error. Intenté buscarla, pero era como si se hubiera evaporado. No pude encontrarla porque ella no quería ser encontrada.

Y así, me quedé solo en la oscuridad, recordando cómo era estar junto a ella. Recordando su calor y su luz. Intenté seguir adelante, pero sin ella, todo era frío y oscuro. No podía ver el futuro sin ella.

Entonces, un día, decidí buscarla de nuevo. No importaba cuánto tardara, no importaba cuántos obstáculos tuviera que superar. La encontraría y le diría lo mucho que la amaba.

La busqué en todos los lugares donde habíamos estado juntos, pero no estaba allí. Busqué en los lugares donde ella solía ir, pero tampoco estaba allí. Parecía como si se hubiera esfumado de mi vida.

Pero no me rendí. Sabía que ella aún me amaba, y sabía que algún día nos volveríamos a encontrar. Y entonces, un día, finalmente la encontré. Nos miramos a los ojos y supimos que nunca nos dejaríamos ir de nuevo.

Era como si el tiempo se hubiera detenido de nuevo. Y entendí que las llamas nunca se apagan del todo, sino que arden para siempre en nuestros corazones.