¿De qué formas podemos reducir la ingesta de conservantes si no podemos evitar completamente su consumocontenedor alimentos

Los conservantes son una parte integral de nuestra vida cotidiana. Los alimentos enlatados, embotellados y procesados ​​están llenos de ellos. Los conservantes mantienen los alimentos frescos y libres de bacterias. Sin embargo, también pueden causar problemas de salud si se consumen en exceso.

Los conservantes químicos son una mezcla de diferentes productos químicos. Algunos de estos productos químicos son cancerígenos. Otros pueden interferir con el funcionamiento del sistema endocrino. Todavía otros pueden dañar el hígado o los riñones.

Los conservantes químicos se encuentran en una amplia variedad de alimentos y bebidas. Están en la mayoría de los alimentos enlatados y embotellados, así como en muchos productos horneados y procesados. También se encuentran en muchas bebidas, incluyendo el agua embotellada, el jugo, el vino y hasta la leche.

Hay muchas formas de reducir la ingesta de conservantes si no podemos evitar completamente su consumo. Aquí hay algunas ideas:

1. Cocine más en casa. Elaborar sus propios alimentos frescos es la mejor manera de evitar los conservantes. Si no tiene tiempo de cocinar todos los días, trate de cocinar por adelantado y congelar las sobras para comer más tarde.

2. Busque «productos naturales». A menudo, estos productos no contienen conservantes químicos. Sin embargo, es importante leer las etiquetas para asegurarse de que no contienen ingredientes artificiales o químicos.

3. Limite su consumo de carnes procesadas y embutidos. Estos alimentos a menudo contienen altas cantidades de conservantes químicos. En su lugar, opte por carnes frescas o congeladas.

4. Evite las bebidas embotelladas o enlatadas. El agua del grifo es generalmente segura para beber, y muchas veces es mejor que el agua embotellada. Si desea beber jugo, compre el 100% natural y evite el jugo concentrado o el jugo con azúcar añadido.

5. Trate de comprar frutas y verduras frescas en lugar de enlatadas o congeladas. Las frutas y verduras frescas son mejores para su salud, y también son menos propensas a contener conservantes químicos que las opciones enlatadas o congeladas.