¿Cómo se puede hacer para que el alimento feliz sea más accesible para todos

Desde hace unos años, el término “alimento feliz” se ha hecho popular entre el público en general. Se trata de una forma de comer que se centra en la calidad de los alimentos, en lugar de la cantidad. El objetivo del alimento feliz es promover la salud y el bienestar, así como reducir el impacto negativo que la mala alimentación puede tener en nuestro cuerpo y en el planeta.

Aunque el alimento feliz puede sonar como un concepto costoso o inalcanzable, no tiene por qué serlo. De hecho, hay muchas maneras de incorporar este estilo de vida en nuestro día a día de forma accesible para todos. Aquí te damos algunos consejos:

1. Comer menos carne: La carne es uno de los alimentos más contaminantes que existen. Además, su producción requiere grandes cantidades de agua y otros recursos naturales. Por lo tanto, reducir el consumo de carne es un buen primer paso para adoptar un estilo de vida más sostenible. No necesitas eliminarla por completo de tu dieta, pero sí reducirla significativamente.

2. Prioriza los alimentos orgánicos: Los alimentos orgánicos son aquellos que se han cultivado sin el uso de pesticidas o fertilizantes químicos. Son más saludables para ti y para el medio ambiente. Además, cuando compras productos orgánicos estás apoyando a los agricultores locales.

3. Compra en tu mercado local: Los mercados locales ofrecen una gran variedad de productos frescos y saludables, muchos de ellos orgánicos. Al comprar en tu mercado local estás ayudando a reducir las emisiones de dióxido de carbono causadas por el transporte de alimentos.

4. Cocina más en casa: Cocinar en casa te permite controlar los ingredientes y la preparación de tus platos, lo que te ayuda a garantizar que están llenos de nutrientes y libres de aditivos químicos. Además, cocinar en casa es más económico que comprar comida preparada o ir a restaurantes.

5. Apoya a las pequeñas empresas: Las pequeñas empresas suelen ofrecer productos más saludables y sostenibles que las grandes corporaciones. Al apoyarlas, estás contribuyendo a fomentar un modelo económico más justo e incluyente.

6. Reduzca el desperdicio: Según estimaciones, cerca del 30% de toda la comida producida en el mundo se desperdicia cada año. Para evitarlo, planifica tus compras y cocinas solo la cantidad necesaria. También puedes buscar maneras creativas de utilizar los restos de comida para evitar tirarlos a la basura.

7. Educa a tus hijos: Enseña a tus hijos desde pequeños los beneficios del alimento feliz para su salud y el medio ambiente. Involúcralos en actividades relacionadas con la comida, como ir al mercado o cocinar juntos. De esta forma podrán adoptar este estilo de vida desde temprana edad y serán más conscientes de sus hábitos alimentarios cuando sean adultos