¿Cómo funcionan los hologramas

Desde que se popularizó la idea de los hologramas en la cultura popular a finales de la década de 1960, el público ha estado fascinado por la posibilidad de ver imágenes tridimensionales flotando en el aire. Aunque mucha gente todavía cree que los hologramas son una tecnología futurista, en realidad, se han utilizado durante décadas en una variedad de aplicaciones. Aquí está un vistazo a cómo funcionan los hologramas y algunos de los lugares donde se pueden ver hoy en día.

Los hologramas se crean usando la interferencia de ondas luminosas. Esto significa que se necesitan dos fuentes de luz, como láseres, para crear un holograma. La primera fuente de luz se conoce como el haz de referencia. Este haz se dirige directamente al objeto que se va a holografear y luego rebota hacia el fotón. La segunda fuente de luz es el haz objeto. Este haz ilumina el objeto y también rebota hacia el fotón.

Cuando ambos haces llegan al fotón, se produce una interferencia entre ellos. Esta interferencia crea un patrón de ondas luminosas que contiene información sobre la forma del objeto. Esta información se puede almacenar en una película fotosensible o en un disco óptico. Cuando se ilumina este patrón con un haz de luz, se produce una imagen tridimensional del objeto original.

Aunque puede parecer magia, en realidad es bastante sencillo entender cómo funciona el proceso. Imagina que estás parado junto a un río y ves las ondas producidas por un pequeño guijarro que cae al agua. Ahora imagina que hay dos personas arrojando piedras al río en diferentes lugares. Cada piedra producirá su propio conjunto de ondas que se mezclarán con las ondas de la otra piedra. Si te alejas del río, verás que estas ondas se combinan para formar nuevas ondas más grandes. De manera similar, cuando los haces de luz se combinan, producen una nueva onda luminosa con información sobre la forma del objeto original.

La calidad de un holograma depende de varios factores, incluyendo la longitud de onda de las fuentes de luz utilizadas y la precisión con la que se colocan los haces. Las imágenes tridimensionales más nítidas y detalladas requieren láseres de alta potencia y mucha precisión. Sin embargo, también es posible crear hologramas más simples usando luces LED y otros tipos de fuentes de luz menos potentes.

Los hologramas se han utilizado durante décadas para fines militares y comerciales. En la década de 1970, se desarrollaron los primeros sistemas holográficos para el almacenamiento y recuperación de datos. Estos sistemas eran extremadamente costosos y no estaban disponibles para el público en general. A mediados de la década de 1980, sin embargo, surgió un nuevo tipo de holograma llamado Holografía Optica Coherente (HOC). La HOC fue mucho más barata y fácil de producir que los sistemas anteriores y pronto comenzó a utilizarse en productos comerciales como tarjetas bancarias con hologramas e imágenes tridimensionales enlatadas.

A finales de la década de 1990, se desarrollaron técnicas para imprimir hologramas en papel y plástico usando impresoras normales. Esto permitió que los hologramas fueran mucho más accesibles y pronto comenzaron a aparecer en productos comerciales como revistas, tarjetas postales y etiquetas para libros. También se utilizaron para proteger documentos importantes contra falsificaciones, ya que era mucho más difícil copiar un holograma que una simple impresión en 2D.

En la actualidad, los avances tecnológicos han permitido que los hologramas se muestren en dispositivos electrónicos como teléfonos inteligentes y tabletas. También se están utilizando cada vez más en el entretenimiento, especialmente en conciertos y eventos deportivos. En 2016, por ejemplo, el cantante Prince fue «revivido» mediante un holograma para actuar junto a sus fans durante un show póstumo en Los Angeles. Y en 2017, el equipo de baloncesto Golden State Warriors usó un holograma para mostrar al jugador Kevin Durant durante su presentación en el Draft NBA.

Aunque todavía estamos lejos de tener holodeck (sala)s como en Star Trek, es evidente que los hologramas ya forman parte integral de nuestra sociedad y probablemente tendrán un papel aún mayor en el futuro próximo .