¿Cómo podemos mejorar nuestra dieta a través de los alimentos

La mayoría de nosotros comemos porque tenemos hambre, pero a veces comemos porque estamos aburridos o tristes. A menudo, comemos más de lo que necesitamos y no siempre elegimos los alimentos más saludables. Si te has fijado últimamente en lo que comes, quizás te hayas dado cuenta de que podrías mejorar tu dieta. ¡Eso está bien! Comenzar a mejorar tu dieta puede ser un gran paso para mejorar tu salud en general. Al cambiar tus hábitos alimenticios, puedes disfrutar de múltiples beneficios para la salud, como una mejora en el metabolismo, una reducción del riesgo de enfermedades crónicas y una mayor energía.

Consejos para mejorar tu dieta

1. Come más frutas y verduras.
Las frutas y verduras son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes que son esenciales para una buena salud. También son naturalmente bajas en calorías y azúcares, por lo que pueden ayudarte a controlar el peso. Trata de incorporar al menos una porción de fruta o verdura en cada comida. Si no te gusta comer muchas frutas y verduras, puedes agregarlas a smoothies o ensaladas. También puedes comprar frutas y verduras congeladas o enlatadas, que suelen estar disponibles todo el año.

2. Elige proteínas magras y vegetales.
Las proteínas magras son esenciales para construir y mantener los músculos, así como para regular el metabolismo. Los vegetales también son ricos en nutrientes y pueden ayudarte a controlar el peso. Trata de incorporar proteínas magras y vegetales en cada comida. Las proteínas magras incluyen pollo, pavo, pescado, tofu, quinoa, frijoles, huevos, nueces y semillas. Los vegetales que son ricos en proteínas incluyen espinacas, brócoli, col rizada, guisantes, garbanzos y chícharos. También puedes agregar proteínas magras y vegetales a los smoothies o ensaladas.

3. Limita el consumo de azúcar añadido.
El azúcar añadido es un tipo de azúcar que se encuentra en muchos alimentos procesados ​​y bebidas azucaradas. Es importante limitar el consumo de azúcar añadido ya que está relacionado con el aumento de peso y la obesidad, así como con el desarrollo de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2. Puedes identificar el azúcar añadido en los etiquetados de los alimentos como jarabe de maíz, azúcar blanco o moreno, glucosa, maltosa, sucralosa o fructosa. Si bien el azúcar natural de las frutas también contiene fructosa, también está acompañada de fibra dietética, vitaminas y minerales beneficiosos. Por lo tanto, no debes evitar completamente las frutas por su contenido de fructosa. En su lugar, trata de limitarte a 2-3 piezas de fruta al día.

4. Limita el consumo de alimentos procesados ​​y refinados.
Los alimentos procesados ​​son aquellos que han sido modificados desde su forma natural original. Están generalmente llenos de ingredientes artificiales e industriales que no son saludables para el cuerpo humano. Los alimentos refinados han sido sometidos a un proceso adicional que elimina cualquier nutriente valioso que pudieran contener originalmente. Los alimentos procesados ​​y refinados deben evitarse lo más posible ya que están asociados con el aumento de peso y el desarrollo de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares. Algunos ejemplos de alimentos procesados ​​incluyen pasteles, galletas, papitas fritas, productos horneados refrigerados/congelados, sopas y guisantes enlatados con salsa blanca o crema agria dentro del envase . Algunos ejemplos de alimentos refinados incluyen pan blanco/trigo blanco/harina blanca/arroz blanco , pasteles , galletas , productos horneados refrigerados / congelados , sopas , guisantes enlatados con salsa blanca o crema agria dentro del envase .

5. Bebe mucha agua.
El agua es necesaria para la vida y el funcionamiento del cuerpo humano. Mantenerse hidratado es esencial para la buena salud ya que el agua ayuda a regular la temperatura corporal , transporta nutrientes por todo el cuerpo , lubrica las articulaciones , protege los tejidos del cuerpo , regula el metabolismo y elimina las toxinas del cuerpo . Se recomienda beber 8 vasos (64 onzas) de agua al día para mantenerse hidratado . Si realizas actividades físicas intensas o si hace mucho calor fuera , debes beber aún más agua para compensar la pérdida del sudor . El agua se encuentra naturalmente en muchos alimentos y bebidas , pero también puede obtenerla directamente del grifo o comprando botellas embotelladas .