¿Qué consecuencias puede tener la mala alimentación

La mala alimentación es una de las principales causas de enfermedades crónicas, tales como la obesity, diabetes, hipertensión, enfermedades del corazón y el cáncer. Según datos del Ministerio de Sanidad, en España la obesidad afecta al 26,9% de los adultos y al 14,9% de los niños. La obesidad infantil se ha duplicado en los últimos 20 años.

Las consecuencias de la mala alimentación no solo son físicas, también pueden ser psicológicas. Los niños con sobrepeso suelen ser víctimas de bullying y tienen menos autoestima. También pueden desarrollar trastornos alimentarios, como la anorexia o la bulimia.

Por todas estas razones, es importante educar a los niños en una buena alimentación desde pequeños. Debemos enseñarles a comer de forma equilibrada y a hacer ejercicio físico regularmente. Si ya somos adultos y tenemos problemas de peso, debemos acudir a un especialista para que nos ayude a cambiar nuestros hábitos alimentarios.