¿Cuáles son las propiedades nutritivas de los alimentos deshidratados

Los alimentos deshidratados son aquellos que han sido sometidos a un proceso de eliminación de agua. Se pueden deshidratar mediante el calor, la congelación o la descomposición. La deshidratación es un método de conservación de los alimentos que se ha utilizado desde hace miles de años. Los alimentos deshidratados tienen una mayor concentración de nutrientes y, por lo tanto, son más nutritivos que los alimentos frescos.

La deshidratación también ayuda a preservar los alimentos, ya que el agua es necesaria para la proliferación de bacterias. Al eliminar el agua, se impide que las bacterias se multipliquen y se prolonga la vida útil del producto. Además, los alimentos deshidratados son más fáciles de transportar y almacenar, lo que los hace ideales para viajes y excursiones.

Los beneficios nutricionales de los alimentos deshidratados dependen en gran parte de la forma en que se hayan deshidratado. Los métodos más comunes de deshidratación incluyen la congelación, la descomposición y el secado. Cada uno de estos métodos tiene sus propias ventajas y desventajas en cuanto a la conservación de nutrientes.

El secado es el método más antiguo de deshidratación y consiste en exponer los alimentos al aire libre para que se evapore el agua. El calor del sol acelera el proceso de evaporación, pero también puede dañar ciertas vitaminas y minerales. Por ejemplo, la vitamina C es sensible al calor y se pierde rápidamente cuando los alimentos son expuestos al sol. El secado también puede alterar el sabor y la textura de los alimentos. Sin embargo, es un método eficaz para preservar la mayoría de los nutrientes y es ideal para frutas y verduras con un elevado contenido en agua, como las uvas, los tomates o las sandías.

La congelación es otro método popular de deshidratación, especialmente para frutas y verduras. Al congelar los alimentos, se detiene el crecimiento bacteriano y se evita la oxidación de las vitaminas sensibles al calor, como la vitamina C. Sin embargo, la congelación no impide que las enzimas naturales presentes en los alimentos continúen su actividad. Esto puede alterar el sabor y la textura de los productos congelados. Además, la mayoría de las vitaminas B se pierden durante el proceso de congelación.

La descomposición es un método menos común de deshidratación, pero que ofrece numerosos beneficios nutricionales. La descomposición se produce cuando los microorganismos presentes en los alimentos fermentan los azúcares naturales presentes en ellos. Este proceso produce ácidos orgánicos, alcoholes y gasolina, lo que hace que los alimentos sean ácidos y ricos en energía. La descomposición también permite que se produzcan nuevos compuestos químicos, muchos de los cuales tienen propiedades medicinales.