¿Cómo podemos recordar mejor los nombres de los alimentos

Desde los tiempos más antiguos, el hombre siempre ha necesitado alimentarse para vivir. Aunque la forma de obtener los nutrientes necesarios ha ido cambiando a lo largo de la historia, lo cierto es que el acto de comer sigue siendo una de las cosas más importantes que hacemos a diario. Sin embargo, a veces resulta difícil recordar los nombres de todos los alimentos que ingerimos. Esto puede ser un problema, sobre todo si tenemos que seguir una dieta específica o si somos alérgicos a ciertos ingredientes. Por suerte, existen algunas formas de facilitar el proceso de memorización. A continuación, te detallamos algunas de ellas:

La primera y quizás más obvia forma de recordar los nombres de los alimentos es familiarizarse con ellos. Si sabemos qué aspecto tienen y qué sabor tienen, será mucho más fácil asociarlos a su nombre correcto. Para ello, podemos acudir a libros de cocina o incluso a internet, donde podremos encontrar multitud de imágenes y descripciones de los alimentos. También es útil probar los diferentes ingredientes para ir familiarizándonos con ellos. Otra forma de conocerlos mejor es aprender a pronunciar sus nombres correctamente. Aunque parezca una tontería, muchas veces nos cuesta pronunciar bien el nombre de un alimento y, por tanto, tenemos más dificultades para recordarlo.

Otro truco para recordar mejor los nombres de los alimentos es asociarlos a objetos o personas conocidas. Por ejemplo, si tenemos dificultades para recordar el nombre del tomate, podemos asociarlo a nuestra madre o a una persona cuyo nombre empiece por la letra T. De esta forma, cuando queramos recordar el nombre del tomate, solo tendremos que pensar en la persona o objeto asociado y este nos ayudará a recordar el nombre correcto. Otra forma similar de asociar los nombres de los alimentos es utilizar rimas o frases hechas. Por ejemplo, podemos decir «el kiwi es un fruta que viene del país Kiwilandia» o «si quieres comer sano, come brócoli». Estas frases absurdas pero divertidas nos ayudarán a recordar mejor los nombres de los alimentos.

Por último, otra buena forma de memorizar los nombres de los alimentos es categorizarlos. Podemos dividirlos en grupos según su origen (frutas, verduras, carnes, etc.), su color (alimentos rojos, amarillos, verdes, etc.), su textura (sólidos o líquidos) o cualquier otro criterio que se nos ocurra. De esta forma, será mucho más fácil recordarlos ya que tendremos un punto de partida para buscarlos en nuestra memoria. Esperamos que estas ideas te ayuden a mejorar tu memoria y a recordar mejor los nombres de los aliment