¿Cuáles son las consecuencias de no cuidar mi alimentaciónalimento dog chow cachorro

La alimentación es uno de los pilares de la salud. Si no cuidamos lo que comemos, estaremos poniendo en riesgo nuestra salud y, consecuentemente, nuestra calidad de vida. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una mala alimentación es un factor de riesgo importante para el desarrollo de enfermedades crónicas no transmisibles, como la obesidad, la diabetes o las cardiopatías.

Pero, ¿qué consecuencias tiene realmente no cuidar nuestra alimentación? A continuación, te enumeramos algunas de ellas:

1. Daño a nuestro organismo: Una mala alimentación puede causar daños a nuestro organismo de diversa índole. Por ejemplo, un exceso de azúcares o grasas saturadas puede provocar que se nos obstruyan las arterias y, consecuentemente, suframos un infarto. También puede provocar problemas en el hígado o en el sistema digestivo.

2. Enfermedades crónicas: Como ya hemos mencionado, una mala alimentación es un factor de riesgo importante para el desarrollo de enfermedades crónicas no transmisibles. De hecho, según datos del Ministerio de Sanidad, en España el 70% de las muertes están relacionadas con estas enfermedades y la mayoría de ellas se podrían evitar si mejoráramos nuestros hábitos alimentarios.

3. Problemas en el rendimiento: Si no cuidamos lo que comemos, también podemos notarlo en nuestro rendimiento diario. Por ejemplo, si nos saltamos el desayuno o comemos alimentos poco nutritivos, es probable que nos encontremos cansados y sin energía a lo largo del día. Lo mismo ocurre si comemos en exceso o si no hacemos una correcta digestión de los alimentos.

4. Mala calidad de vida: Todos estos problemas derivados de una mala alimentación pueden repercutir negativamente en nuestra calidad de vida. Por ejemplo, si somos propensos a sufrir enfermedades crónicas, tendremos que ir más a menudo al médico y estaremos pendientes de nuestra salud. También podemos notarlo a nivel energético y mental, ya que si no cuidamos nuestra dieta podemos sentirnos apáticos e incluso depresivos.

Por todo ello, cuidar nuestra alimentación es fundamental para mantenernos sanos tanto física como mentalmente. No solo debemos procurar comer de forma equilibrada, sino también hacer ejercicio físico regularmente y evitar el consumo abusivo de alcohol y tabaco.