¿Por qué se utiliza una bolsa de alimentación enteralbr

La bolsa de alimentación enteral se utiliza cuando una persona no puede ingerir los alimentos necesarios para mantenerse saludable por vía oral. Esto puede ser debido a una enfermedad o a un tratamiento médico que requiera que la persona esté en un estado de nutrición óptimo. Las bolsas de alimentación enteral están llenas de líquidos y/o polvos que contienen nutrientes esenciales, como proteínas, vitaminas y minerales. Estos líquidos y/o polvos se mezclan con agua para formar una bebida nutritiva que se administra a través de una sonda nasogástrica o gastrostomía.

Las bolsas de alimentación enteral se utilizan cuando una persona no puede ingerir los alimentos necesarios para mantenerse saludable por vía oral. Esto puede ser debido a una enfermedad o a un tratamiento médico que requiera que la persona esté en un estado de nutrición óptimo. Las bolsas de alimentación enteral están llenas de líquidos y/o polvos que contienen nutrientes esenciales, como proteínas, vitaminas y minerales. Estos líquidos y/o polvos se mezclan con agua para formar una bebida nutritiva que se administra a través de una sonda nasogástrica o gastrostomía.

La bolsa de alimentación enteral se utiliza para administrar los nutrientes directamente al estómago o intestinos, lo que permite que el cuerpo asimile la mayor cantidad posible de nutrientes. Los médicos prescriben la bolsa de alimentación enteral cuando hay un riesgo de que la persona desnutrida no pueda ingerir los alimentos necesarios para mantener su peso corporal, ya sea porque está enferma o porque está recibiendo tratamiento médico que interfiere con su capacidad para ingerir los alimentos necesarios.

Hay muchas razones por las que se podría prescribir la bolsa de alimentación enteral. Algunas de las condiciones más comunes que requieren el uso de una bolsa de alimentación son:

– Trastornos del esófago, como el esofagitis eosinofílica o el esófago de Barrett
– Trastornos del estómago, como la gastritis crónica o la úlcera péptica
– Trastornos del intestino, como la enfermedad inflamatoria intestinal o el síndrome del intestino irritable
– Cáncer del esófago, estómago o intestinos
– Tratamiento con quimioterapia u otros tratamientos médicos agresivos