¿Cómo se gestiona la merma de alimentos en España

El desperdicio de alimentos es un problema que afecta a todos los países del mundo. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), se estima que cada año se tiran o se pierden unos 1,3 mil millones de toneladas de comida, lo que equivale al mismo peso que toda la población de China.

En España, el desperdicio de alimentos es un problema muy relevante. Según el estudio «Gestión de residuos en España», realizado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en 2015 se generaron 10,8 millones de toneladas de residuos alimentarios, lo que supone un incremento del 3% respecto al año anterior.

Aunque el desperdicio de alimentos es un problema multicausal, existen varias acciones que se pueden llevar a cabo para reducirlo. En primer lugar, es importante tener un buen control sobre la compra y el consumo de los alimentos. Aquellos productos que no se van a consumir deben conservarse adecuadamente para evitar que se echen a perder.

Asimismo, es necesario fomentar el compostaje y el reciclaje de los residuos orgánicos. El compostaje es un proceso natural en el que los microorganismos descomponen los residuos orgánicos para convertirlos en materia orgánica fertilizante. Por su parte, el reciclaje permite transformar los residuos orgánicos en biogás, abonos o productos químicos.

Otra forma de reducir el desperdicio de alimentos es donando aquellos productos que no se van a consumir. Existen numerosas ONG’s y entidades públicas que se encargan de recoger este tipo de alimentos y distribuirlos entre aquellas personas que más lo necesitan.

Por último, es importante sensibilizar a la población sobre el problema del desperdicio de alimentos. A través de campañas de información y educación, se puede concienciar a la población sobre la importancia de reducir el desperdicio de alimentos.