¿Cuáles son los beneficios de comer alimentos sin envoltura

Muchos alimentos que venden en los supermercados vienen empacados individualmente o en grupos para mantenerlos frescos y apetitosos. Aunque esto es cómodo, requiere de mucho papel, plástico o metal, que a su vez requieren energía para producirlos. Comer alimentos sin envoltura es una manera de reducir el impacto ambiental de nuestra comida y también tiene muchos beneficios para la salud.

Al comprar productos con menos envoltura, estás ayudando a reducir la cantidad de residuos que se generan. Según el Environmental Protection Agency (EPA), el 30% de los residuos domésticos en Estados Unidos son envases y embalajes. El reciclaje de estos materiales requiere energía y a veces es costoso. Al reducir la cantidad de envases que compras, también estás reduciendo la cantidad de residuos que deben ser reciclados o que terminan en vertederos.

Comer alimentos frescos y sin procesar es una manera segura de evitar los aditivos químicos y los conservantes que se agregan a muchos productos envasados. Algunos de estos aditivos pueden ser perjudiciales para la salud, sobre todo si se consume en grandes cantidades. Por ejemplo, el glutamato monosódico (un tipo de conservante comúnmente usado) puede causar migrañas y problemas digestivos en algunas personas. Los aditivos químicos también pueden interferir con el funcionamiento normal del sistema endocrino.

Comer alimentos frescos también es una forma de garantizar que obtengas nutrientes esenciales. Muchos nutrientes se pierden durante el procesamiento y el almacenamiento de los alimentos. Por ejemplo, las vitaminas B y C son sensibles a la luz, el calor y el oxígeno, por lo que se pierden rápidamente cuando los alimentos son expuestos a estas condiciones. Los aceites omega-3 también se deterioran con el tiempo, lo que significa que los alimentos envasados ​​pueden no ser tan ricos en nutrientes como podrían ser si fueran frescos.

Otro beneficio de comer alimentos frescos es que te ayuda a controlar el consumo de calorías. Los alimentos frescos son generalmente más bajos en calorías que los procesados ​​y los empacados, ya que no contienen azúcar añadido o grasa extra. Además, cuando cocinas tus propios alimentos, puedes controlar la cantidad de aceite y sal que usas, lo que también ayuda a reducir la cantidad de calorías que consumes.

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